La casa rural en Ooty en el lago Emerald

La casa rural en Ooty en el lago Emerald

Salí de Wayanad con la sonrisa perpetua, después de ver dos elefantes salvajes en lo alto de la colina. La ruta me estaba gustando mucho. Me equivoque de carretera y me encontré con esta preciosa roca rodeada de vergeles y granjas, el día prometía mucho.


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Y así fue al encontrar, después de dar unas cuantas vueltas, Red Hills. Es una plantación de Té, convertida en casa rural, situada en la montañas Nilgiri. A unos 20 se encuentra Ooty, la capital de la zona, que es conocida en India como «The Queen of Hill Stations» por su belleza. Actualmente la economía de la zona se basa en el turismo y la agricultura. Los ingleses llegaron cerca del año 1800 y quedaron cautivados, comparando estas tierras, con la europea Suiza.


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Los bungalows de Red Hills conservan todo la historia colonial en sus paredes y es casi como estar en casa del Sir Inglés, que la ocupaba hace decenas de años. La finca está situada a media altura de la montaña sobre un terraza con unas espectaculares vistas al lago Emerald.


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Como casi siempre, el segundo día, muy pronto por la mañana salimos a dar un paseo hasta la cumbre más cercana. Tuve la suerte de ser acompañado por el director de la finca Mr. Mohan, que me trató como si estuviera en mi propia casa. Vimos muchos pájaros preciosos y cantarines, un ciervo y vistas espectaculares de toda la comarca.

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Toda el área de las colinas Nilgiri es preciosa si te gusta la vida rural. Plantaciones de Té, granjas, valles, picos, puentes, los campesinos, un paraíso para disfrutar de la verdadera India alejado de los humos de las grandes ciudades. Y además un destino ideal para viajar durante los cálidos meses de verano del norte de India, por su clima templado en verano y frío en invierno, debido a su altitud, que es de más de 2000 metros.

Pondicherry, Chennai, Tamil-Nadu

Esta vez me ha gustado tanto el video y resume tan bien lo mejor del viaje que lo pongo lo primero.


La llegada a Chennai fue movida. El vuelo no pudo aterrizar por el mal tiempo y se desvió a Banagalore a 45 minutos. Después de esperar una hora dentro del avión salimos de nuevo hacia Chennai. Desde aeropuerto me dirigí en un Ambassador destartalado a la Catedral de Santo Tomás, apostol de Jesús que según la iglesia llego a estas tierras en el año 52 d.c.

Después de varias semanas en el sur de Delhi se pierde la percepción de que estas en India. Llegaba a Chennai pensando que me iba a encontrar otra cosa diferente. Mas bocinas, vehículos más contaminantes, basura, y mucha basura, en la playa especialmente.

El resto del paseo por la zona de la estación de autobuses no hizo más aumentar mi incredulidad ante lo que estaba viendo que no necesita más comentarios.

Después, en Pondicherry, disfrutamos de largos paseos por las playas de los alrededores, viendo como viven los nativos cerca del mar.

Nos quedamos embobados viendo a los pescadores salir en sus barcas a por el pan nuestro de cada día con el mar muy revuelto. Los que no estaban en el mar, estaban trabajando con las redes en la playa. Le pregunté a uno de ellos y me dijo que la gran mayoría salían de pesca a las tres de la madrugada.

El domingo casi todo el pueblo estaba en la playa disfrutando de la tarde. Los niños en la orilla jugaban vigilados por lo padres desde el arriba. Vendedores y otros pintorescos personajes recorrían la playa ofreciendo sus productos y servicios.

En una de la playas cerca de Pondicherry encontré una escuela de surf con una ola buena para todas las edades y también principiantes, ánimo!