Me encanta esta frase. Esta mañana he salido a la calle decidido a encontrar a un conductor de rickshaw al que el otro día le tiré una foto en uno de mis viajes. El motivo que me ha llevado a hacerlo ha sido darle una copia impresa de la foto en un A4, después de retocar con el potochop y darle una aire Ferrari a su rickshaw.
Sabía que iba a ser complicado, pero recordaba perfectamente el lugar y he pensado que era cuestión de preguntar por la zona. Para esto he necesitado un auto rickshaw. El primer problema ha sido explicarle al conductor, que quería encontrar al tipo que sale en la foto para darle un copia. Los conductores de rickshaw la gran mayoría no saben ni papa de inglés. En estos casos se suele parar a un estudiante o alguien con pinta de hombre de negocios para que haga de traductor de inglés a hindi. Primero hemos probado con un cartero sin éxito. Luego un hombre de negocios se ha prestado amablemente a traducir mi petición al conductor del auto rickshaw. Cuando le he terminado de contar en inglés, antes de traducir a hindi, me ha dicho que era imposible, que son muchos los conductores de rick y que se mueven por diversas zonas. Tenía razón.
Después de una media hora preguntando a varios conductores en la zona, con una par de interpretes espontáneos, y una vuelta en auto rickshaw que me ha costado 100 rupias, le he encontrado. Si se ha armado revuelo cuando he comenzado la búsqueda con sus compañeros conductores, cuando le he encontrado cerca de la parada, el lío ha sido tremendo, de esos que ralentizan el tráfico de la gran Delhi.
Todo el mundo quería ver la foto y sin bajarme del autorick se ha montado un buen pollo a mi alrededor. Shivamandal, es el nombre del protagonista y se ha emocionado cuando se ha visto en la foto. Todos sus compañeros le hacían muecas y gestos de felicitación.
Desde hace tiempo planea por mi cabeza una idea que relaciona el gran premio de formula 1, que se celebrará en Delhi a finales de octubre, con las carreras de rickshaws en las calles de la ciudad… nada es imposible.