1. Viaja antes a Marruecos

Es un país maravilloso y cercano. Allí podrás entrenarte en el arte del regateo o del turista indiferente. Además disfrutarás de su maravillosa cocina que mezcla los sabores mediterráneos con las especias y aromas de los países de oriente.

2. Mira a los ojos de los sin techo de tu barrio

Date una vuelta por el centro de tu ciudad, por las calles más comerciales y observa a los mendigos sin techo. ¿Nacieron así? ¿Son tan diferentes a ti como parecen cuando los obvias? ¿Qué han hecho tan mal para merecer dormir en la calle y mendigar para comer?

3. Piensa que todo el mundo es bueno

A pesar de los que nos dice la televisión todos los días, lo cierto es que en el mundo hay muchísima más gente buena que mala. Prueba a dar los buenos días a tu vecino y verás qué pasa. Quizá tendrás que insistir un poco debido a la falta de costumbre.

4. Compara geográfica y demográficamente India con España

Es fácil imaginar una España con 220 millones de habitantes, en pleno frenesí capitalista después del franquismo, junto al éxodo masivo de las zonas rurales hacia las grandes urbes en busca de la tierra prometida.

5. Prueba a regatear el precio en El Corte Inglés

Siempre sonriendo al dependiente. Esto me encanta hacerlo. ¿Crees que el precio del El Corte Inglés es justo? Por eso no regateas, ¿Verdad?

6. Observa la basura que se acumula en los suburbios de tu moderna ciudad

Sobre todo si viajas en tren. Mira toda la basura que hay cerca de las vías y en los campos cercanos a las poblaciones, a pesar de nuestros servicios de limpieza municipales, algo que en India todavía no está implementado.

7. Juega con todos los niños que te encuentres

Si te dejan, claro. Y no tires de ellos, como de los perritos de paseo. No les obligues, déjalos ser niños que es lo más maravilloso de la vida. En India cada vez que veas a un niño pobre y sucio sonreirás, porque es libre y niño.

8. Lee un poco sobre el Hinduismo

Creo que el problema de las religiones es que no se actualizan como el Windows o el Mac OS. Los evangelios y los escritos antiguos de otras religiones no se pueden interpretar al pie de la letra como hace miles de años y sobre todo después de la revolución industrial. Las castas tienen sentido en tiempos no muy remotos en las pequeñas comunidades rurales, cuestión de supervivencia . La unión hacía la fuerza. Cada miembro tenía sus obligaciones por el bien común de la comunidad. Esto ha cambiado mucho. Ahora todos queremos ser guapos y millonarios, por nuestra cuenta.  ¿Y si no lo consigues?

9. Infórmate del dinero público que se destina a la iglesia católica en España

Sí, es cierto. En India cada vez que visites un templo o te acerques a un lugar sagrado te van a pedir dinero.
¿A qué destina la Iglesia católica nuestro impuesto de la renta?

10. Regálate un fin de semana de turismo en Barcelona

Y verás como allí todo el mundo es bueno y honesto contigo 🙂

P.D. Este post está escrito de manera impulsiva. No hay que tomárselo muy en serio. No es mi intención ofender a otros viajeros que hayan visitado el Subcontinente, solo quiero contar mi propia experiencia. India me ha hecho llorar y gritar muchas veces, pero otras muchas más, ha hecho que me emocione y vea el lado más humano de las personas, algo que me resulta mucho más difícil en nuestro bonito parque temático occidental.